El equipo técnico abocado al desarrollo del programa «Origen Chubut. Productos Patagónicos» definió tras la realización de encuestas a emprendedores y empresas de toda la provincia y sendas consultas con organismos públicos y público privados de desarrollo local, los ejes de evaluación para la admisión de productos que deseen ser inscriptos como usuarios del sello provincial.
- Rol del emprendimiento en la cadena de valor: se busca promover y distinguir a aquellos emprendimientos que tengan un impacto positivo sobre el empleo o la demanda de bienes y servicios de origen local. Se valorará la mayoría de proveedores e insumos locales. Esto será aún más importante en los casos en los que la incorporación de insumos de origen chubutense implique la transformación de materias primas o de insumos con bajo nivel de valor agregado en bienes o servicios de mayor complejidad.
- La historia y el saber hacer: se destacará la puesta en valor de técnicas y actividades tradicionales en la provincia o que se distingan por su valor cultural. Este eje busca que los emprendimientos den cuenta de un origen eminentemente local, preferentemente cuando este se encuentre ligado a actividades tradicionales (lana y sus derivados; frutas finas y sus derivados; industria forestal y sus derivados; pesca y sus derivados) pero también a prácticas culturales significativas (el tejido o la cerámica tradicional pero también el esquí o la pesca con mosca).
- La sustentabilidad social y/o ambiental: se privilegiará a las empresas y emprendedores cuyos procesos productivos sean amigables con el ambiente, o bien cuyas propuestas de valor exhiban propósitos ligados a la resolución de problemas sociales y/o ambientales en línea con las acciones de Chubut +B.
- La innovación contextual: se privilegiará a los emprendimientos innovadores que ofrezcan productos o servicios innovadores, pero también a aquellas que logren mejoras en el proceso productivo de cualquier producto o servicio ya existente. Se hace notar que se considerará la innovación contextual es decir que los productos y/o procesos sean innovadores en el contexto en el que se producen.